sábado, 2 de mayo de 2009

Diego y sus palabritas puntillosas y su amor al rock tan clásico, y su prolija intelectualidad tan aburrida, y las vanaglorias de su padre y las glorias orgásmicas de su madre y su rincón de premios en la casa y su colección de publicaciones preadolescentes en los diarios locales olvidables, yo quería ser como Diego...